Seguidores

miércoles, 10 de noviembre de 2010

Strange



Ojalá pudiera decir que hoy no duele tanto, ojalá pudiera decir que al despertarme no me ha dolido, que al respirar tampoco me ha dolido. Ojalá pudiera decir que hoy ya no duele, pero si, duele, y no para de hacerlo. Es consistente, es horrible, es lamentable. Ojalá pudiera decir que tengo la madurez de una niña de once años. Ojalá, de verdad, la pudiera tener para mas cosas para las que no la tengo. Son cosas con las que te acostumbras a seguir... Pero ojalá no tuviese todo lo que tengo encima, ojalá pudieran hacerme llorar cosas que ya no lo hacen, porque es tal la manera en la que me endurecí, que soy incapaz de hacerlo. Ojalá... ojalá pudiera.
Ojalá no pensara de la manera en que pienso, asqueada por todo, sin disfrutar de nada y ojalá no necesitara un blog para poner lo que siento porque nadie es capaz de entenderlo. Ojalá estuviese ya en la unicersidad estudiando  y trabajando en un futuro para mi, quizás, ojalá eso me ayudara. Pero ojalá es solo una palabra, una palabra que ami ya no me sirve, que ami ya no me hace efecto.
¿Conoceis el acero? De ese material soy yo, en eso es en lo que me he convertido.
Demasiado duro? No, todos los materiales tienen un punto de fusión, hasta el propio acero.

1 comentario:

  1. Bello llok e me piace tuo blog troppo carino . ci sto sequindo . passa anche te no mio grasias;.)

    ResponderEliminar